Sábado, 10 de Marzo de 2007
Economía y Negocios, El Mercurio
ISABEL ÁLVAREZ
Leyda, Casablanca, Salamanca, Illapel y cercanías de Osorno son las zonas que más se han valorizado desde 1998.
Las plantaciones de fruta y la industria vitivinícola en la IV y V Región, y los proyectos ganaderos en la X han transformado a las tierras agrícolas de estas zonas en las que más se han valorizado en el transcurso de los últimos diez años.
En el caso de la región de Valparaíso, Jorge Goycoolea, de Propiedades Bauer & Claro, afirma que el valle de Leyda y el de Casablanca son los que más han aumentado su valor debido al buen clima y suelo para la plantación de uva para la producción de vinos blancos, considerados los mejores de Chile.
En ambos valles, una hectárea que hace diez años tenía un valor cercano a los $3 millones, hoy cuesta entre $10 millones y $12 millones, dependiendo del suelo y del sector específico.
En la X Región, principalmente en las cercanías de Osorno, los terrenos agrícolas se han transformado en los más apetecidos por los inversionistas.
En Tattersall afirman que la industria lechera, la producción de carnes rojas de gran calidad y plantaciones de frutos como arándanos o avellanos europeos, han atraído a los inversionistas lo que ha hecho que la hectárea haya pasado de costar $ 1,6 millón, hace diez años, a los $3 millones hoy.
Adicionalmente, el corredor de propiedades José Errázuriz explica que los sectores de la zona que se encuentran en las cercanías de algún lago son de los más costosos en la zona sur, bordeando los $2,5 millones la hectárea. "Son campos con doble propósito: son ganaderos pero también funcionan como parcelas de agrado", afirma
En tanto, en la zona norte del país, Salamanca e Illapel (IV Región) son los sectores más rentables: una hectárea en Illapel pasó de costar $2 millones a entre $3,5 millones y $5 millones. Salamanca, en tanto, ha triplicado su valor: hace diez años una hectárea tenía un precio cercano a los $2 millones, y ahora puede llegar a costar $6 millones.
Esta valorización se debe a su disponibilidad y manejo de agua de riego y a su cercanía con los embalses del valle Choapa. A ello se suma el aumento en la demanda por tierras para plantar uva de consumo fresco, así como paltos y naranjas para exportar.
La cara opuesta la han vivido algunos sectores de la IX Región, en donde los conflictos de tierra con los mapuches han derivado en una mantención de los precios y un atractivo casi nulo para los inversionistas.
Errázuriz explica que los proyectos forestales son los que han sustentado los precios de la tierra dentro de la Región de la Araucanía. Actualmente, una hectárea en la región fluctúa entre $1,5 millón y $2 millones, cifra similar a la de años atrás.
RODRIGO GONZALEZ FERNANDEZ
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