Una nueva razón para usar a Chile como Plataforma de

Una nueva razón para usar a Chile como Plataforma de Inversiones Agregando una nueva ventaja competitiva a la estabilidad de su ambiente de negocios y al alto nivel de desarrollo de su sistema financiero, Chile recientemente introdujo una nueva ley para alentar a los inversionistas extranjeros a reutilizar al país como una plataforma para invertir en otros mercados latinoamericanos y mundiales.

 

La ley, que entró en vigencia el 23 de noviembre de 2002, constituye una poderosa herramienta para promover el crecimiento económico y fomentar la inversión en Chile y otros países, tanto por empresas locales como extranjeras. La iniciativa es parte de una Agenda Pro-Crecimiento, lanzada por el gobierno chileno, en alianza con el sector privado, en 2001. A noviembre de 2005, Chile ya tenía acuerdos de doble tributación  vigentes con Argentina, Canadá, México, Brasil, Ecuador, Perú, Noruega, Corea del Sur, Polonia, España, Reino Unido, Dinamarca y Croacia. Profundizando el enfoque basado en el respeto a las reglas que caracteriza la gestión económica en Chile, la nueva ley ofrece a los inversionistas la garantía de una claridad e imparcialidad aún mayores en el trato que reciben sus inversiones. El gobierno, los partidos políticos, los inversionistas extranjeros y los expertos en impuestos cooperaron estrechamente en el diseño de esta nueva ley, ayudando a mejorar el proyecto original del gobierno. Además de ofrecer nuevos incentivos para el uso de Chile como plataforma de inversiones, la ley evita poner en peligro su bajo riesgo país o exponerlo a que sea ocupado como un paraíso fiscal. De igual manera, la ley incluye salvaguardas para evitar la perdida de ingresos fiscales y su uso para elusión tributaria. Las principales provisiones de la nueva ley se pueden resumir de la siguiente manera: Una empresa establecida exclusivamente como una plataforma para inversiones en el extranjero y dentro de Chile, está exenta de los impuestos a la renta chilenos sobre las ganancias que los accionistas extranjeros obtienen de sus inversiones fuera de Chile. Estas empresas plataforma pueden ser abiertas o cerradas pero, en el segundo caso, deben someterse a las mismas regulaciones que las empresas abiertas. Hasta el 75% de los accionistas de la empresa plataforma puede tener residencia en Chile; los accionistas no-residentes no pueden residir en paraísos tributarios. Los accionistas en la empresa plataforma pueden aportar capital ya sea en la forma de acciones en otras empresas o en divisas extranjeras. En cuanto a los impuestos sobre accionistas locales e inversiones en Chile, la empresa plataforma es tratada como una empresa extranjera. Como resultado, si invierte en activos chilenos, debe tributar sobre las ganancias que obtiene de estas inversiones. De igual manera, las ganancias de la empresa plataforma que corresponden a accionistas chilenos están sujetas al mismo impuesto -y tienen el mismo derecho a créditos tributarios- que una inversión en el extranjero que repatría sus utilidades a Chile. Las empresas plataforma que invierten en Chile deben distribuir sus utilidades en el orden en que fueron obtenidas, partiendo por las más antiguas. Por lo tanto, se requiere contabilidad separada para las utilidades provenientes de inversiones en el extranjero y de activos en Chile. No hay restricciones sobre el endeudamiento doméstico de una empresa plataforma, pero su endeudamiento externo no puede exceder el valor del capital aportado por los inversionistas extranjeros. En todo caso, la empresa debe pagar los impuestos correspondientes (de la Ley de Timbres y Estampillas en el caso de créditos chilenos, o un impuesto de 4% sobre los pagos de intereses en el caso de endeudamiento externo). La empresa plataforma no puede invertir en paraísos tributarios, los que son definidos por el Ministerio de Hacienda de Chile sobre la base de una lista preparada por la OCDE. Esta restricción no se aplica si, una vez que las acciones han sido compradas o se ha hecho una inversión, un país es con posterioridad clasificado como un paraíso tributario. Las empresas plataforma no tienen derecho al secreto bancario. Cualquier información que se requiera debe ser facilitada a través del Servicio de Impuestos Internos (SII), siguiendo los procedimientos establecidos en la ley y sus correspondientes regulaciones. Al eximir a las empresas plataforma de los impuestos chilenos sobre ganancias obtenidos en el extranjero, la ley aborda el problema de la triple tributación y proporciona a los inversionistas extranjeros un incentivo adicional para tomar ventaja de la estabilidad económica e institucional de Chile, su infraestructura de alto nivel y sus recursos humanos de primera calidad. Además, debido a que una empresa plataforma puede incluir a accionistas chilenos, puede beneficiarse  de la familiaridad de estos últimos con otros países latinoamericanos, y de su capacidad para detectar oportunidades de negocios en la región. Como resultado, se espera que la nueva ley fomente la creación de alianzas estratégicas entre inversionistas extranjeros y socios chilenos para abordar proyectos regionales. Más aún, para facilitar la entrada del capital extranjero a Chile, la ley permite que las empresas que ya están establecidas en la región trasladen sus centros de operación a Chile, sin incurrir en los costos de transacción involucrados en vender y volver a comprar activos. Al preparar esta nueva ley, el gobierno tomó precauciones especiales para evitar que Chile sea usado como un paraíso tributario. Es por esta razón que las empresas plataforma no pueden ingresar capitales provenientes de países que caen en esta categoría, ni tampoco tener inversiones en ellos. De igual manera, para asegurar la transparencia y la utilización apropiada de la nueva ley, las empresas plataforma deben renunciar al secreto bancario, mientras que el SII ha sido autorizado para proporcionar información sobre las empresas plataformas a sus contrapartes en los países en que éstas tienen sus casas matrices. Asimismo, a la vez que se incentiva la inversión en Chile y se permite a los residentes locales participar en empresas plataforma, la nueva ley se protege contra una merma en la recaudación de impuestos sobre los chilenos y sobre las ganancias obtenidas en Chile. Con este fin, se asume, para efectos tributarios, que una empresa plataforma está registrada en el extranjero, protegiendo así los ingresos fiscales, sin limitar la flexibilidad que una empresa plataforma requiere para poder explotar acabadamente el potencial de los activos e inversionistas locales. Además, al gobierno le interesaba prevenir un aumento en el endeudamiento extranjero que, al ser significativo, podría dañar una de las ventajas más valiosas de Chile - su bajo nivel de riesgo país. Los sólidos fundamentos macroeconómicos de Chile -que se reflejan precisamente en su clasificación de riesgo- crecientemente lo destacan internacionalmente, y el gobierno está determinado a no poner en peligro esta ventaja competitiva clave para los inversionistas extranjeros.